Valerika nunca se cuadraba y hacía su cama para recibir elogios de los padres. Siempre sintió un espíritu rebelde en sí misma y una voluntad de romper cualquier sistema para ganar. Pero por el bien de Anton, ella está dispuesta incluso a ponerse pantalones cortos de pijama, porque él doma su temperamento salvaje con una vara nervuda negra que funciona para una mujer informal, como la pipa de videos familia xxx un fakir para una serpiente.