Jane Wilde solo quiere recibir videos de sexo en familia un masaje de primera y relajarse al máximo. No hay prohibiciones, porque incluso puedes tocarte mientras el masajista hurga en alguna parte. Pero Tommy Pistol no es en vano un arma y ahora el cliente no puede abandonar su sesión sin llegar al final feliz más jugoso, que no se expresará en aceite, sino en esperma fluyendo.